Estrella
Un día encontré una estrella, donde nadie lo hubiera imaginado nunca. Decidí hacerla mia para que iluminara mi vida, así que la guardé en una cajita cerca de mi corazón.
Cuando brilla me hace sonreir, me hace feliz. Me ha llevado a conocer sensaciones para mí inimaginables. La alegría y el cariño se han hecho mis compañeros de viaje.
Por desgracia, de vez en cuando la estrella deja de brillar, guardada en la cajita permanece dias sin mostrar su belleza. De vez en cuando yo habro la cajita buscando un atisbo de luminosidad, pero la vuelvo a cerrar desilusionada.
El día menos pensado, al abrir la caja, su luminosidad me vuelve a embriagar. Pero sus etapas oscuras se repiten cada cierto tiempo, haciéndose una rutina. Los momentos en que la estrella brilla, son sumamente valiosos para mí, pero el tiempo en que la estrella oscurece es tortura para mi alma. Viéndola apagada se me encoje el corazón y las lágrimas me invaden en cualquier rincón. Tanto dolor, tanto llanto, es una carga pesada. Mi sensibilidad y mi inseguridad me atormentan noche y dia, por el miedo a volver a esa oscuridad. ¿Por qué aguantar tal sufrimiento? He decidido liberar esa estrella, porque en el tiempo que ha compartido mi vida, he podido observar que con el contacto de algunas personas su luz se hace más cálida, por eso la decisión de dejarla es la correcta. Abandono tanto su luz como su oscuridad, dejando que esa estrella pueda iluminar la vida de otra persona, la que le corresponda y que nunca se vea interrumpido su brillo.
Ahora solo me cabe esperar el encuentro con la estrella que me pertenece, la que haga que todos mis dias estén llenos de amor y felicidad...
Cuando brilla me hace sonreir, me hace feliz. Me ha llevado a conocer sensaciones para mí inimaginables. La alegría y el cariño se han hecho mis compañeros de viaje.
Por desgracia, de vez en cuando la estrella deja de brillar, guardada en la cajita permanece dias sin mostrar su belleza. De vez en cuando yo habro la cajita buscando un atisbo de luminosidad, pero la vuelvo a cerrar desilusionada.
El día menos pensado, al abrir la caja, su luminosidad me vuelve a embriagar. Pero sus etapas oscuras se repiten cada cierto tiempo, haciéndose una rutina. Los momentos en que la estrella brilla, son sumamente valiosos para mí, pero el tiempo en que la estrella oscurece es tortura para mi alma. Viéndola apagada se me encoje el corazón y las lágrimas me invaden en cualquier rincón. Tanto dolor, tanto llanto, es una carga pesada. Mi sensibilidad y mi inseguridad me atormentan noche y dia, por el miedo a volver a esa oscuridad. ¿Por qué aguantar tal sufrimiento? He decidido liberar esa estrella, porque en el tiempo que ha compartido mi vida, he podido observar que con el contacto de algunas personas su luz se hace más cálida, por eso la decisión de dejarla es la correcta. Abandono tanto su luz como su oscuridad, dejando que esa estrella pueda iluminar la vida de otra persona, la que le corresponda y que nunca se vea interrumpido su brillo.
Ahora solo me cabe esperar el encuentro con la estrella que me pertenece, la que haga que todos mis dias estén llenos de amor y felicidad...
8 comentarios
olvido -
Nela -
olvido -
Bienvenida, es un placer verte por aqui :) Un beso bien grande ^_^
imma -
satin{Hc} -
Pues sí ojalá la encuentre Hellcat...como todos.
Hellcat -
silvia -
silvia -
muchos besis!!